Un novedoso sistema antirrobo para automóviles nos llega directamente desde Japón, concretamente desde el Instituto de Tecnología Industrial Avanzada y se basa en el reconocimiento fisiológico del conductor mediante sensores que lo identifican al sentarse sobre el vehículo.
Este sistema sensorial todavía se encuentra en fase de desarrollo y básicamente consiste en implantar un sistema de sensores en el asiento del conductor para que identifique características propias de su fisonomía como la estatura, el peso o el calor corporal.
De momento se trata sólo de un estudio experimental, puesto que para salir al mercado todavía deberán depurarse algunos aspectos importantes, como la variedad de las constantes vitales de las personas durante ciertas épocas del año como cuando se engorda o se adelgaza, además de la posibilidad de programar varios perfiles distintos, puesto que habitualmente los vehículos suelen ser compartidos por varios miembros de la unidad familiar.
Vía| Tec.nología
