Según un estudio publicado en la revista especializada Science, un grupo de investigadores ha logrado confirmar que la formación de la Luna se dió luego de la mayor colisión sufrida por la Tierra en toda su historia.

resizer

La gran cantidad de escombros producidos por el choque formó una densa nube de residuos alrededor de nuestro mundo que, obedeciendo las leyes de la gravedad, se fueron uniendo hasta dar forma a lo que hoy es nuestro satélite.

Según los estudios realizados, se pudo llegar a establecer esta teoría a partir de la medición de proporciones entre varios isótopos del oxígeno, titanio, silicio y otros elementos. Dichas proporciones son una especie de «firma» a partir de la cual pueden determinar de qué planeta procede una roca concreta. En el caso de la Luna, comparar esas proporciones entre rocas lunares y terrestres puede decirnos cuánto de Theia (el cuerpo que se estrelló contra nuestro planeta) y cuánto de la Tierra hay actualmente en nuestro satélite.

Según un grupo de investigadores alemanes, quienes a partir de ciertos estudios complementaron la investigación inicial, «podemos estar razonablemente seguros de que la gran colisión se produjo. Y segundo, que por fin podemos hacernos una idea de la geoquímica de Theia. Parece que Theia tuvo que ser muy similar a lo que nosotros llamamos condritas de tipo E. Y si eso es cierto, podremos predecir la composición geoquímica e isotópica de la Luna, que es una mezcla de materiales de Theia y de la Tierra. El siguiente objetivo es saber cuánto material de Theia ha sobrevivido en la Luna».


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.