La polémica sobre si es bueno o no comer carne no es algo moderno, sino que siempre ha existido. Si bien con el vegetarismo y el veganismo moderno el tema ha tomado un nuevo impulso, lo cierto es que se ha direccionado como una discución filosófica acerca de la vida en general.
La discución basicamente gira en torno a los costos y los beneficios que tiene para el organismo la ingesta de carne. En concordancia con ello, los cientificos especializados se han puesto en campaña para romper con algunos mitos que se han generado alrededor de este alimento.
El exceso de grasas
Se ha sostenido generalmente que las carnes rojas tienen un alto contenido graso, lo que lo convierte en un alimento riesgoso. Y es cierto que todos los animales tienen grasa en sus cuerpos, por lo que los productos derivados también la tendrán. Pero los científicos se han preguntado qué tan malo es el aporte graso de las carnes respecto de otros productos como la leche y los quesos por ejemplo.
Si bien en estos últimos es mucho más sencillo deshacerse de casi la totalidad de la grasa, en la carne eso no es menos cierto, ya que por más que sea intramuscular, a la mayoría de los cortes de carne es posible quitarles la totalidad de su contenido graso.
Las proteinas, minerales y vitaminas
Otro de los mitos que se han propugnado desmentir los científicos es un argumento tomado por la mayoría de los defensores de la carne: el aporte de proteínas, vitaminas y minerales. Si bien esto es cierto, también encontramos proteínas en otros alimentos que provienen del reino animal y del reino vegetal, como el brócoli, el maíz y las espinacas. Sin embargo, la carne aporta la vitamina B12, que no la tiene ningún vegetal, y es fundamental para prevenir enfermedades como la anemia.
Peligros de comer carne
El consumo excesivo de carne siempre es riesgoso, fundamentalmente por lo que dijimos antes: su contenido graso. Lo recomendable es un consumo de carne de 65 a 100 gramos diarios, dependiendo de la edad y las necesidades energéticas de cada persona. Sin embargo, el riesgo del consumo excesivo de carne no es mayor al riesgo que implica el consumo excesivo de cualquier producto. La clave será una dieta balanceada, que combine cantidades necesarias de diferentes alimentos que proporcionen una adecuada fuente de nutrientes. Aunque quizás sería mejor evitar alguna forma específica de consumir carne, por ejemplo, las carnes procesadas.
Como conclusión podemos decir que el consumo de carne no sólo es beneficioso para los seres humanos, sino que es fundamental, ya que al no consumir productos derivados de los animales nos estaremos privando de nutrientes exclusivos que sólo algunos alimentos como la carne y la leche nos pueden dar.
