Según afirman prestigiosos cientificos de la NASA, que han estudiado durante varias decadas los siguientes datos, la contracción de los glaciares en la Antártida occidental ha cruzado un umbral y es ahora «irreversible» e «imparable».
Eric Rignot, profesor de Ciencias del Sistema de la Tierra de la Universidad de California y glaciólogo de la NASA, sostuvo que «el estudio muestra que hemos cruzado un umbral crítico» y «no se sustenta en simulacros de computadora o modelos numéricos, sino que se apoya en la interpretación empírica de más de cuarenta años de observaciones desde satélites de la NASA», agregó.
Ya en la década de 1970, los cientificos que estudiaban esta zona del planeta, donde se encuentran seis glaciares gigantes, señalaban a la región como una de las más amenazadas. Todos ellos se extienden desde las montañas hacia el mar, y la linea de asentamiento, o sea, el lugar donde el glarciar toca el suelo submarino, ha ido retrocediendo de manera muy rápida.
Estos glaciares continuarán derritiéndose hasta que desaparezcan, y el hecho de que los glaciares reaccionan casi simultáneamente indica una causa común», que es el «aumento de las temperaturas en el océano», aseguró el cientifico. Esto desembocará inevitablemente en un aumento creciente de los niveles del mar.