No mezclar el placer con los negocios no parece ser una norma de comportamiento habitual entre los franceses, ya que los datos de una encuesta realizada han desvelado que uno de cada tres franceses ha mantenido una relación esporádica en su lugar de trabajo.
El volumen total de empleados que admitieron haber mantenido una relación dentro del entorno laboral hicieron un total de 31% y un 63% de las relaciones admitidas fueron consideradas por sus protagonistas como aventuras esporádicas, mientras tan sólo un 17% decidieron hacerlas pública en trabajo, un 22% prefirieron mantenerlas en secreto y un 6% decidieron cambiar de empleo para evitar un conflicto de intereses, parece ser que después de todo, lo Franceses son los Europeos que menos se resisten a un buen affair.